Artículo 9 "María"

Tres puntos de vista, una misma historia.

El artículo que os traigo hoy es un escrito un tanto especial. Además estoy completamente convencido que aunque sea una temática muy recurrida para escribir, sigo pensando fielmente que es por su gran importancia por lo que se hace. Sin ánimo de hacer algún spolier antes de empezar, os voy a contar una historia inventada aunque bien podría ser perfectamente un caso real, según lo que he investigado. En esta historia participaran tres personas en la que cada una dará su punto de vista y ya os adelanto que bastantes distintos entre sí.  

Sara, la amiga.

Yo soy Sara la amiga de María, esta historia tengo que decir que yo me siento muy culpable por lo que os voy a contar pero que claramente yo no sabía esta realidad sino nunca le hubiera dejado que se le acercarse. Yo por María siempre he sentido un inmenso aprecio por eso siempre la he tenido como la hermana que nunca llegue a tener. En la escuela le ayudaba hacer los deberes, a estudiar... incluso le llegue a conseguir un puesto de trabajo en la imprenta que yo llevaba trabajando varios años  para que por fin volviéramos a compartir escritorio. Mi jefe se llamaba Juan, un chico muy atento y apuesto que desde el día que entró a trabajar María en la imprenta no le quito ojo de encima. Hasta que al final, consiguió lo que quería.

Yo en un principio estaba muy contenta porque les veía muy felices. Pero fue pasando el tiempo y María empezó a dejar de salir con nosotras después del trabajo a tomarse los ron cola de los viernes que tanto le gustaban. Nos contaba escusas como "Chicas hoy me duele mucho la cabeza y quiero retirarme pronto así que ya otro día..." o " Chicas que hoy tengo que ir a la tintorería antes de que cierre, a por un traje de Juan..." así fueron pasando las semanas y solo la veíamos en el trabajo. Algo le pasaba a María.

 Empezó a venir muy torpemente al trabajo, es decir, ya no venia como siempre sonriente y muy coqueta, se le notaba algo dejada y con un rasgo entristecido. Cuando le preguntábamos si algo le pasaba siempre lanzaba una negativa con la cabeza, yo ya no sabía como sacarle lo que le pasaba. Hasta que empezó a faltar reiteradamente al trabajo y ya eso sí que dije hasta aquí. Sino me lo quiero contar me planto en su casa y hasta que no me lo diga no me marcho. Al salir del trabajo, hice eso me plante allí y le pique a la puerta varias veces hasta que por fin abrió la puerta con cara de sorpresa como si estuviera esperando a otra persona, a decir verdad su cara era una mezcla entre sorpresa y alivio.

Estaba como a medio maquillar por lo que le comenté, "Anda, te ayudo acabar de maquillarte, te vistes y nos vamos a tomar un café". Ella dijo que no, que me marchara por favor que ya tenía planes que iba llegar Juan y que no era buena idea que me viera aquí. Yo no daba crédito ¿Por qué me tenía que marchar? ¿Qué le pasaba a Juan conmigo? y lo peor ¿Qué le pasaba ella conmigo?. "María, hasta que no me digas lo que te pasa no me voy a marchar", y me fui hacer un café. Cuando entre en la cocina estaba todo tirado en el suelo, como si les hubiera entrado a robar.  "María que ha pasado estás bien, ¿Qué os han robado?". Ella se hecho a llorar y al llorar se le corrió el maquillaje. No hice falta que dijera una palabra, ya sabía lo que le pasaba, el problema no lo tenía conmigo sino con el hijo de puta de su marido.

Juan, el marido.

Yo soy Juan he de decir que todo esto no hubiera pasado, si hubiera sido una mujer más sensata. No es mi culpa lo que ha pasado. Lo que dice la furcia de su amiga Sara son solo mentiras. ¿A que no sabéis por qué? Ella esta mal de la cabeza, está obsesionada con María, es repulsiva. Si María dejo de ir al trabajo, no es porque yo la tuviera retenida en casa. Sino porque ella misma pensó que igual era mejor ser una ama de casa impoluta, que no ser ni una buena secretaria, ni una buena mujer, que atiende a su marido.

Además he de decir que si dejó de salir con sus amigas no fue por mi culpa tampoco, fue porque ella  misma priorizo la familia y más ahora que estaba embarazada. Y lo último que tengo que argumentar es que ese día que fue sin avisar a nuestra casa, el que fue pidiendo cuentas a la policía, cuando como una loca fue al salir de mí casa. No quiso ni escuchar a María, ya que ella misma, ya se había montado su propia historia. María se había golpeado al caer de la ducha, ya bastante duro es para nosotros ese accidente... Ya que le provocó un aborto natural. Encima tuvimos que aguantar como esa chiflada, me acusaba de ser un "monstruo".

María, la mujer.

Yo soy María ya se lo que pensaréis de mí a esta altura del relato. Pero yo os voy a contar mi punto de vista. Porque no soy ninguna pobre desgraciada, ni busco la compasión de nadie. Sino que si hay alguna mujer en mí lugar que este leyendo este artículo, poder ayudarla y decirle que no esta sola, nunca estamos solos. Yo soy una mujer que todo el mundo al pasar a mi lado hubiera dicho es suficientemente lista como para que no le pase esto. Dado que en esta sociedad se atribuye al maltrato a mujeres de clase nivel medio bajo, que no tienen estudios, es decir, mujeres sin recursos. Y esto es una mentira gigantesca una mujer de mi categoría ha sido maltrata por su jefe y posterior marido.  Es verdad al principio te colman de regalos te dicen mil te quieros, pero después de todo esto comienza el infierno y llega la primera bofetada. En ese momento tú ya llegas a estar suficientemente enamorada y anulada como para pensar lo que realmente ven todos a tú alrededor. Le agradezco a Sara que pese a que siempre haya estado cuidándome como una hermana y yo no la haya tratado tan bien, ese día apareciera para enseñarme la realidad. Decirme que eso no podía seguir así. Siento amiga de verdad mentirte todas las veces que lo hice por culpa de mi marido, pero es que estaba muy ciega, no quería ver lo que estaba sucediendo y más con un hijo en camino, aunque al producirme el aborto en una de sus palizas pensé en denunciarle...ya me veía muy sola, me había olvidado de ti, hermana. Gracias por sacarme de ese infierno.

Bueno chicos esto ha sido todo ya se que lo hecho más largo que en otras ocasiones, pero de verdad creía necesario en los tiempos que corren hacer un artículo sobre la violencia de género pero dándole una vuelta como ya es característico en "La Vida de Hoy".Ya que este pasado 8 de marzo ha sido un día histórico esperemos que esto también se logre erradicar por completo y se haga el 25 de noviembre (Día de sensibilización y denuncia sobre la violencia contra las mujeres en el mundo) otro día histórico.

Buenas tardes y que paséis una buena semana.

Comentarios

  1. Una historia triste pero una realidad en nuestros días. Gracias por aportar con tus palabras, un pasito más a la lucha por la sensibilización y denuncia contra la violencia de género. ¡Sigue así!

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